19 de marzo de 2015
Hace dos noches soñé que el espíritu se expresaba en el sentir
interno y al despertar intentaba poner palabras, me decía algo así como que en relación a la
vida diaria de esta realidad no tenia que poner la energia en pensar sobre si estar
o ir a determinados espacios de la rutina diaria, que lo único a hacer es SER, solo
experimentando el ahora cuando voy al trabajo, paseando o estando en casa, eso es todo,
que voy a saber ver en cada ahora todo
lo que pudiera necesitar, es un reconocimiento interno. En la siguiente noche volvía
a decirme que no tenia nada que decidir, solo estar presente, atenta al ser que
está en mi eterno e infinito, en los ahoras amplios y profundos, donde no hay
tiempo.
Siento la determinación de la entrega del viajero o el espíritu
que está en este cuerpo, es calido amoroso y sutil, dejando que el lleve la existencia en esta realidad, que a su vez se
comunica con otras realidades, que están aquí y se expresan y manifiestan en múltiples
formas como puede ser en una canción, un olor, los colores de un amanecer, un libro que
llega, al leer un anuncio, una mirada de otro ser que me encuentro, al mirar la
lluvia o el mar,….. así el silencio estando en presencia ahora, evocan e
inspiran sentires profundos mas allá de
lo que perciben los sentidos externos, estos encuentros sagrados suceden
en no tiempo, mostrando lo necesario en este ahora y van enriqueciendo la vida
con luz, alegría, abrazos, silencios y llenando de amor todos los espacios que
así respiro.
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